Con los efectos secundarios del secuestro de Hanna aún pesando mucho sobre las 'liars', las chicas comienzan a sospechar de Elliott Rollins, mientras el estado de Ali empeora. La tensión crece entre Liam, Aria y Ezra mientras trabajan juntos en el libro. Spencer y Caleb están en el límite, aunque ninguno de ellos quiere hablar sobre el incómodo tema tabú. Mientras tanto, Emily recibe una inquietante llamada telefónica y trata de encontrar una forma de ver a Ali.