Cuando Tsanko Petrov, un trabajador del ferrocarril, se encuentra un millón de levs en las vías del tren, decide devolver la totalidad del importe a la policía. El Estado le recompensa por ello con un nuevo reloj de pulsera... que pronto deja de funcionar. Mientras tanto, Julia Staikova, jefa de relaciones públicas en el Ministerio de Transporte, pierde su viejo reloj. Así comienza la lucha desesperada de Petrov para que le devuelvan no sólo su viejo reloj, sino también su dignidad.